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San Pietro a Corte constituye uno de los complejos monumentales más importantes de la ciudad de Salerno. La enorme campaña de excavaciones ha devuelto distintos niveles de conocimiento de la cultura material de este sitio que tiene muchas capas. El complejo incluye un área subterránea, la Capilla de Santa Ana, el campanario, el Aula superior de representación y la Iglesia de “San Pietro a Corte” (Capilla Palatina).
Desde el punto de vista diacrónico, el complejo monumental tiene cuatro estratificaciones principales:
- un edificio termal romano (siglo I-II d.C.);
- un edificio de culto paleocristiano con adjunta un área sepulcral (siglo V-VII d.C.);
- el aula del trono y la capilla de edad longobarda (segunda mitad del siglo VIII d.C.);
- la Iglesia de “San Pietro a Corte” con frescos románicos (desde el siglo XII);
- el palacio público medieval, a partir del siglo XIII, sede también de las sesiones del Parlamento y lugar donde se celebra la importante ceremonia de la entrega de las licenciaturas de la Escuela Médica Salernitana. El área subterránea estaba ocupada, en época romana, por una instalación termal en la que posteriormente fue construido el palatium con adjunta capilla.
El complejo termal, realizado en la época flavio-trajana (siglo I-II d.C.), se desarrollaba en altura por unos 13 m., mientras se articulaba según la sucesión dinámica de los ambientes con bóvedas de crucería y de cañón. En particular, el aula rectangular del frigidarium estaba separada en dos partes: la primera estaba cubierta por una bóveda de crucería mientras que, la segunda, que tenía una bañera en mármol por una bóveda de cañón. Los ambientes continúan hacia el noreste, debajo del actual palacio Fruscione. Los balnearios fueron abandonados en el siglo IV, probablemente, después de una inundación. En la antigüedad, al menos desde el final del siglo V, las estructuras relativas a los balnearios fueron en parte reutilizadas por las comunidades cristianas de Salerno como lugar de culto (ecclesia) con adjunta área sepulcral. Se conservan sepulturas importantes, como aquella en forma de arcosolio, situada en la esquina noroeste del espacio occidental del frigidarium, perteneciente a dicho Socrate, ‘vir spectabilis’ de origen greco-bizantino y que lleva el siguiente epitafio:" Cuándo era cónsul nuestro señor Anastasio perpetuo Augusto, el día catorce antes de las calendas de diciembre, aquí descansa en paz Sócrates, magistrado de alto rango que vivió cuarenta y ocho años".
Además del texto de Sócrates, se encontraron otros epígrafes, que se pueden datar en la mitad del siglo V hasta casi el siglo VII, que demuestran la existencia en la ciudad de personajes de distintas etnias y extracciones culturales.
La sucesiva fase se caracteriza por la llegada y la siguiente intervención de prínceps gentis longobardorum, Arechi II, que, como dicen las fuentes históricas y literarias, en 774 trasladó la capital del ducado de Longobardia Menor de Benevento a Salerno, para huir de la invasión de los Francos de Carlo Magno que, poco tiempo antes, habían causado la derrota del reino Longobardia Mayor en el Norte.
Salerno, además, representaba una salida fundamental hacia el mar y un centro de control muy importante para el comercio y las rutas comerciales que atravesaban los territorios longobardos, conectándolos con el resto del Mediterráneo.
El esfuerzo político y económico invertido en Salerno, elegida como residencia por el príncipe Arechi, se nota en la recalificación edilicia caracterizada por el fortalecimiento del sistema defensivo y la construcción de numerosos edificios. Fue entonces, precisamente, que edificó en ese lugar, para si mismo y para su gobierno, una grandiosa residencia en el centro de la ciudad cerca de los muros y que dan hacia el mar, cuya magnificencias y ricas decoraciones vienen descritas por los cronistas de la época, entre ellos Pablo Diácono, Erchempertus, León Ostiense hasta el autor anónimo del Chronicon Salernitanum (siglo X).
El Chronicon, en particular, cuenta que Arechi II, para construir la capilla en honor de los santos Pedro y Pablo, destruyó, excavando las fundaciones, el templo de Príamo, obteniendo de la estatua del dios pagano el oro con el que decoró su iglesia. Las excavaciones han puesto en evidencia que, con la fundación del palatium, fueron destruidas las bóvedas del edificio termal y, al interior del aula paleocristiana y de su parte delantera sepulcral, fueron construidos pilares poderosos y semi pilares para sostener el techo de la sala de representación y de la capilla palatina. Otro pasaje del Chronicon Salernitanum cuenta que la capilla estaba en el norte del palacio. “ (Arechi) fortaleció esta ciudad en todas sus partes y, en ella, construyó un palacio de maravillosa extensión y belleza y allí, en la parte norte levantó una iglesia en honor de los beatos Pedro y Pablo”
De su palacio, lamentablemente, queda muy poco, probablemente porque está incluido en las estructuras modernas. La restauración del aula superior ha revelado la estructura de pared longobarda realizada con la alternancia de piedra y ladrillos por lo menos en tres lados: en la fachada, al oeste, se puede detectar una serie de arcos que se apoyan sobre columnas para formar una galería, en el lado norte, una ventana geminada y una serie de ventanas con una sola abertura que iluminaban el interior.
La parte oriental del aula está ocupada por un ábside cuadrangular, mientras que, en el lado meridional, probablemente, estaba el acceso al ambiente directamente del palatium.
Elemento arquitectónico particular es sin duda la logia presente en los lados septentrionales y meridionales que encuentra comparaciones en varios palacios de época antigua y bizantina realizados en el ejemplo de las domus romanas.
El complejo de San Pietro a Corte representa el único ejemplo en Europa de arquitectura palaciega civil de la época longobarda.
Después de la conquista normanda de 1076 y hasta la época suaba, las salas del edificio se destinaron a fines públicos. La sala de representación del edificio se utilizó para las sesiones del parlamento de la ciudad y, más tarde, para las ceremonias solemnes de entrega de las licenciaturas de la Escuela Médica Salernitana.
El Chronicon Salernitanum menciona la existencia de un campanario construido alrededor del año 922 d.C. por voluntad del príncipe Guaimar II aunque no parece tener correspondencia con el actual campanario románico situado en el lado norte de la iglesia que, en cambio, pertenece sin duda a una época posterior al siglo X, como se ha establecido a través de las relaciones estratigráficas con las demás estructuras supervivientes y las cuotas de los planes de carreteras antiguas.
En el ambiente hipogeo, a partir de la época normanda, se instaló un oratorio. El espacio del cementerio, utilizado como astillero, albergó tanques para la producción de cal y luego fue abandonado y separado del salón litúrgico, cuyo acceso fue asegurado a través de una escalera de comunicación entre la calle norte y la iglesia. La reforma del edificio llevó, no sólo al refuerzo de las paredes perimetrales sino también a la creación de nuevos frescos que decoraron el edificio. En el pilar construido por Arechi II, para sostener el piso de la capilla palatina superior, fueron pintados una Virgen entronizada con el Niño y, a la derecha, una santa; representación que se repite también en los otros lados del mismo pilar.
Las paredes perimetrales están ocupadas por la representación de teorías de santos. Entre las que se reconocen: San Jorge, San Nicolás, los santos Pedro y Pablo, una Virgen Odigitria y San Jacobo. Frescos que se fechan entre finales del siglo XII y el siglo XIV.
En la edad moderna la Iglesia Palatina de Arechi II sufrió muchas transformaciones. Dos de los cuatro altares presentes en la Iglesia están coronados por pinturas sobre tabla. Una sobre el altar mayor y la otra en el altar de la derecha.
El fresco en el altar mayor representa la Virgen en gloria entre los santos Pedro y Pablo donde aparecen también San Ciro, médico y ermitaño y San Juan soldado, su discípulo. Arrodillado en oración está representado Decio Caracciolo, abad hasta 1613, que encargó el fresco atribuido a Decio Tramontano.
El martirio de San Esteban representado mientras viene apedreado, en cambio, es el sujeto representado en la segunda pala.
Obra muy interesante es el lienzo que representa la “Gloria de la Virgen". puesta en el techo, realizada por Filippo Pennino o por un artista cercano a él, a mediados del siglo dieciocho. La escena central donde tiene lugar el triunfo de la Virgen y de los varios Santos incluido San Mateo, está rodeada de estructuras arquitectónicas ilusionistas habitadas por ángeles y querubines.
Contactos :
Largo San Pietro a Corte, n.8
84121 Salerno
Horarios - de 10.00 a 18.30 - última entrada 18.00
Traduzione in lingua spagnola a cura del Liceo Statale "Regina Margherita" di Salerno anno scolastico 2022-2023, Dirigente Scolastico Angela Nappi.
